VITICULTURA ENRAIZADA EN LOS VALORES DE LA TIERRA:
La elaboración de nuestros vinos parte de la puesta en valor de aspectos patrimoniales, históricos, culturales, ecológicos y paisajísticos.
SENDA - UN EVOCADOR PASEO HASTA CASAS DE LOS PINOS.
La senda se traza con el paso del tiempo y de los caminantes. Como el cura que la recorría por el aprecio que sentía por los vinos de la localidad.
CUBO - VINOS INSPIRADOS EN LA CULTURA Y LA ARQUITECTURA LOCAL.
Un cubo es una edificación de la arquitectura local usada como refugio o almacén. Se construye con las piedras arrancadas a la tierra para mejorar así su fertilidad.
TECNOLOGÍA Y TRADICIÓN UNIDAS EN ARMONÍA
En la bodega se integran nuevas tecnologías que aseguran alta calidad del vino con elaboraciones tradicionales en depósitos de hormigón.
El terreno, microclima y la acción humana, determinan en Casas de Los Pinos, el verdadero triángulo de la calidad. Los singulares vinos de Candelaria, se consiguen con el concurso en equilibrio de estos tres factores:
- Terreno: situado a 725 m sobre el nivel del mar, conjuga sobre una roca madre calcárea, zonas arcillosas y zonas arenosas, cubierto por una importante capa de canto rodado.
- Microclima: muy poco lluvioso, caluroso en verano y frío en invierno. En la época de maduración se da una gran amplitud térmica.
- Acción humana: el conocimiento, la tradición y la adaptación de los sistemas de cultivo al entorno natural para la producción de las mejores uvas.
La Candelaria cuenta con 450 Ha de viñedos propios, donde se cultivan las siguientes variedades tintas: Tempranillo, Bobal, Monastrell, Garnacha, Cabernet Sauvignon y Syrah. También se cultivan variedades blancas: Viura o Macabeo, Sauvignon Blanc y Airén.